El problema comenzó con una pequeña pérdida de agua que intentaron arreglar, pero la terminaron empeorando.
Según cuentan los vecinos, los operarios que estuvieron trabajando, mientras intentaban arreglar la pérdida rompieron el caño madre, lo taparon rápido y se fueron. Y a los días, el agua potable empezó a salir a la superficie y ahora es toda una laguna.
El barrio se llama Santa Rosa II y está ubicado detrás del polideportivo municipal.
Los vecinos cuentan que primero hicieron el reclamo en la casa central de OSSE; pero no se los quisieron tomar, aduciendo que debían hacerlo en la oficina de 25 de Mayo. Pero cuando fueron a la oficina de OSSE en 25 de Mayo, les dijeron que ya iban a ir, y que estaban coordinando con el municipio los trabajos a realizar.
Los días pasan, la reparación no llega y el agua sigue saliendo a borbotones.