Mientras el fiscal de la causa pide que indaguen como sospechosa a la madre de las tres hermanitas raptadas en Caucete, la mujer salió por otro lado a solicitar que le restituyan a las nenas. Esto se da después de que el juez de la causa le prohibiera acercarse a las pequeñas en el tiempo que duré el proceso y hasta que decidan quién quedara con la guarda de ellas.
El juez Guillermo Adárvez, del Tercer Juzgado de Instrucción, aún no decide si cabe imputarle la comisión de algún delito a la mujer, de apellido Pelaye, revelaron fuentes judiciales. En su momento prohibió que mantuviera contacto con las niñas mientras dure la investigación. Las nenas actualmente son asistidas por un organismo del Estado. El fiscal Daniel Galvani cree que la mujer tiene cierta responsabilidad, dado que no era la primera vez que “prestaba” a las niñas a Mario “El Chingolo” Ortiz, el cartonero que se llevó a las pequeñas y supuestamente las sometió sexualmente. El hombre fue citado a indagatoria este lunes, pero se abstuvo de declarar
Lo cierto es que por el momento no existe ninguna imputación contra la mujer y ella tampoco siente que sea responsable de lo que sucedió con sus hijas. Es más, considera que es una víctima más en este caso. Con este argumento, la señora concurrió este lunes a la mañana a entrevistarse con Carlos Reiloba, a cargo de la Defensoría Oficial N° 4, y con su asesoramiento presentó un escrito en el Tercer Juzgado de Instrucción. En dicha presentación solicita al juez Adárvez que se le dé participación en la causa como víctima y madre de las menores damnificadas, a su vez pide que le informen sobre el estado de las niñas y, por último, que se las restituyan para que pueda volver a estrechar vínculos con ellas. La presentación judicial ya está hecha. Ahora es el juez Adárvez o el magistrado que entre de turno el que evaluará la solicitud.