Trascendieron los nombres de los dos jóvenes sospechados de violar a una amiga o conocida suya el domingo en la mañana en Caucete. Ambos son dos “chicos bien” de esa ciudad, que ahora están presos por un presunto ataque sexual que es investigado por el juez Alberto Benito Ortiz, del Primer Juzgado de Instrucción, informaron fuentes ligadas al caso.
Los detenidos fueron identificados como Maximiliano Ruarte Tello, de 23 años, y Fernando Olivera, de 21, revelaron fuentes de la causa. Ambos se conocían con la víctima y la hermana. Allegados a la investigación revelaron que los jóvenes y las chicas se encontraron en un conocido boliche de Pocito el domingo último en horas de la madrugada. A la salida, los jóvenes se ofrecieron a llevarlas de regreso a Caucete y en el camino decidieron seguir la diversión en la casa de una de las chicas, que había dejado a su hijo al cuidado de una prima.
El grupo de “amigos” siguió bebiendo y escuchando música en esa vivienda de Caucete hasta la mañana del domingo. En un momento dado, la menor de las hermanas salió a buscar cigarrillos y abandonó la casa. La mayor de ellas fue a acostarse porque estaba supuestamente alcoholizada y muy cansada, mientras que la prima –que cuidaba al hijo de esta última- se quedó charlando con los dos muchachos. La versión que maneja la Policía, en base a la denuncia de la víctima y sus familiares, es que uno de estos jóvenes dijo que se iba al baño y se metió a la habitación donde dormía la joven mamá. A los minutos aparentemente hizo lo mismo su amigo.
Cuando la chica despertó descubrió que estaba semidesnuda y uno de los jóvenes se encontraba sentado sin ropa al pie de la cama, explicaron, según la denuncia. El otro permanecía al lado, también desnudo. La víctima se puso mal y empezó a los gritos. Los muchachos se retiraron, pero en horas de la tarde la chica se presentó en la Seccional 9na de Caucete y los denunció.
En el transcurso de la semana, Fernando Olivera y Maximiliano Ruarte Tello tomaron conocimiento de la existencia de esa denuncia e hicieron averiguaciones a través de sus abogados, según versiones policiales. Fue así que, cuando se enteraron este jueves de que el juez Ortiz había ordenado sus detenciones, ambos decidieron entregarse voluntariamente en la comisaría de Caucete.