A pesar del blanqueo de capitales impulsado por el Gobierno nacional -que redundó en una cifra de 116.800 millones de dólares- la fuga de dinero no mermó.
Así, según datos del balance cambiario del Banco Central revelados por Clarín,durante 2017 la salida de dólares al exterior por «la formación neta de activos externos de libre disponibilidad” sumó 22.148 millones de dólares, cifra muy similar a la registrada en el 2008.
«En 2017, el stock de activos en el exterior del sector privado creció en 27.920 millones de dólares, principalmente por el continuo drenaje de ahorros y utilidades logradas en el país hacia el exterior», señala en ese sentido el economista jefe de Ecolatina, Lorenzo Sigaut (hijo).
Así, para el especialista «ahorrar en moneda extranjera y en el exterior ha sido una estrategia defensiva frente a los distintos episodios económicos disruptivos de nuestro país que concluyeron en la pérdida patrimonial o confiscación de los ahorristas».
Lo cierto es que el blanqueo sólo generó el ingreso al sistema financiero nacional de parte del dinero en efectivo «bajo el colchón», mientras que la mayoría de los depósitos en el exterior blanqueados -incluso los de funcionarios públicos- nunca fue repatriada.
Aumento de la deuda
Mientras tanto, la deuda pública y privada externa (en divisas) suma 232.952 millones de dólares: 51.782 millones más que la registrada a diciembre de 2016.
Según el INDEC ese aumento tiene que ver principalmente con «las emisiones de deuda del Gobierno general y el Banco Central». Concretamente, el 61 por ciento corresponde al primero, y el 8 al segundo.