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Ojos brillantes, nervios, sonrisas, algo de incredulidad. No eran las caras de los chicos sino de los padres de los alumnos de la Escuela Industrial. Fueron a despedir a sus retoños en un verdadero viaje de estudios nada más ni nada menos que a la NASA.

“Aprendimos a hacer paella con ellos, para ayudarlos a conseguir recursos para viajar. Poco ha sido lo que sacaron, pero vale el esfuerzo. Han demostrado que quieren ir como experiencia única que es”, dijo Walter Antuña, el papá de Francisco. “Están en la edad justa para que les haga bien ver estas cosas y aprender de la experiencia. Es la primera vez que viaja al exterior sin familiares”, contó orgulloso.

“Pudiendo ir de mini vacaciones en un viaje de egresados, ellos priorizaron otra cosa: un verdadero viaje de estudios. ¡Hay que ver cómo se organizaron! Para hacer las paellas había que hacer un curso de manipulación de alimentos, lo hicieron. Buscar los elementos, lo hicieron. Gestionar pasaportes y visa, lo hicieron. Y es muy bueno que hayan tenido apoyo de autoridades para esto”, destacó Raúl Buffagni, padre de Marcos, que viaja y preside el Centro de Estudiantes. “Ha sido todo muy emocionante”, alcanza a decir el joven, mientras organiza a sus compañeros para la foto y sigue ultimando detalles.  “Siempre ha sido muy inquieto él, desde chiquito” confiesa su mamá Alicia Beatriz Borchert.

Valijas cargadas de emoción

Como destacó Marcos, el presidente del Centro de Estudiantes, ha sido una previa muy emocionante. Desde que el año pasado un egresado de la EIDFS promoción 1968 les hiciera la propuesta de conocer California, la UCLA y NASA han pasado muchas cosas. Uno de los compañeros sufrió la muerte de su padre en un terrible accidente en la ruta y otro se enfermó gravemente de cáncer. Parte de lo recaudado en las 4 paellas que hicieron fue con destino a la ayuda económica de esas familias. Ha sido un año movilizante. Sin dudas esas personas y esos recuerdos se van también en las valijas.

Una puerta abierta al mundo

El grupo, además de vivir una experiencia inolvidable; dejó sentado un importante precedente en la Embajada de EEUU en Argentina. Es que el país del norte es muy exigente a la hora de brindar la VISA y más en el caso de ser grupales. Gracias al tesón de los jóvenes, el apoyo de directivos y hasta de funcionarios vnculados a Ciencia y Técnica; los sanjuaninos lograron obtener la VISA grupal por viaje de estudios. Eso quedará como antecedentes si ocurriera otra oportunidad como esta, para que aprovechen generaciones futuras.

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