El 11 de mayo de este año el policía Alejandro Guzmán (27) atropelló con su auto a una familia entera. Pero quien resultó más perjudicada fue la mujer, Emilce Guzmán (22) que iba junto a su esposo y su hijo de 2 años. La chica estaba embarazada de casi 9 meses. Como consecuencia del brutal accidente el bebé que estaba por nacer murió. Además Emilce no podrá tener más hijos.
Ahora el juez Juan Pablo Ortega investiga a los efectivos de la Comisaría 9º de Caucete por presunto encubrimiento. El magistrado quiere saber si los policías cambiaron la escena del choque y dejaron manipular pruebas al acusado. Además procesó a Guzmán y lo embargó por la suma de $300.000.
Aparentemente el personal policial de esa seccional cuando atestiguaron, cometieron imprecisiones o hubo algún tipo de contradicción en lo que dijeron.
Gendarmería realizó una pericia. Mediante esa prueba el juez supo que la tarjeta de video con el momento del accidente fue manipulada. Es decir que el instante previo al impacto del auto contra las víctimas no está. Esa manipulación fue el 15 de mayo, cuatro días después del choque.
El policía había dicho que el sistema de video se activó solo para cortar la imagen, aunque eso fue desestimado ya que el peritaje demostró que hubo un programa de edición que se borró. Además otra cuestión que complica al agente es que en el momento del siniestro trabajaba en Delitos Complejos, destinada a las investigaciones informáticas.
Las peritos indicaron que Guzmán manejaba a 80 kilómetros por hora y que las víctimas fueron impactadas cuando circulaba a unos 64 kilómetros por hora, en una zona en la que la velocidad máxima permitida es de 40.
fuente: telesol